Mostrando entradas con la etiqueta Salsa Pesto. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Salsa Pesto. Mostrar todas las entradas

lunes, 27 de marzo de 2017

SPAGHETTI CON ALCACHOFAS Y PESTO DE ESPINACAS Y NUECES

Volvemos a tener ante nosotros un nuevo Free Meat Monday. Y lo vamos a cumplir a rajatabla con un espectacular y diferente plato de pasta. Para la ocasión tiramos de los detalles de Nueces de California para confeccionar una salsa pesto original a base de espinacas y nueces. La clásica lleva albahaca y piñones, pero os aseguro que esta variante le llega a la altura.

Todo ello además viene secundado con unas maravillosas alcachofas. Y os intento relatar una forma sencilla de limpiarlas para así ahorrarnos tirar de "las de bote". La diferencia, como casi siempre, es abismal, así que os animo encarecidamente a que os lancéis a prepararlas vosotr@s. 

Una receta sencilla, sana, vegetal y llena de sabor. Pues al lío... ¡Mandiles arriba! 

Spaghetti con alcachofas y pesto de espinacas y nueces

Ingredientes (4 personas)
  • 300 grs de Spaghetti 
  • 6 alcachofas medianas
  • Agua 
  • Sal
  • 1 limón
  • Aceite de Oliva
Para el pesto de espinacas y nueces
  • 100 grs de espinacas
  • 60 grs de nueces 
  • 1 diente de ajo
  • 50 grs de Queso Parmesano rallado 
  • Aceite de Oliva Virgen Extra
  • 1 poco de zumo de limón
Tiempo: 30 minutos

------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Las alcachofas

Lo primero de todo es ir "tuneando" nuestras brillantes y hermosas alcachofas, aquí presentes. Preparamos un bol con agua fría y el zumo del limón para, según las vayamos limpiando, caigan en el baño y no se oxiden. Todo mimo es poco...


Les cortamos el tallo y con ayuda de una puntilla (o cuchillo pequeño y afilado) recortamos la parte más gruesa de la base. Quitamos las hojas exteriores hasta que veamos la base amarilla. Cortamos después la punta de las alcachofas para quedarnos con el corazón. Lo partimos en cuatro trozos y eliminamos los pelillos que veremos en el interior. 


Salteamos las alcachofas troceadas en una sartén con un poco de aceite de oliva y sal. Alrededor de 4-5 minutos, para que cojan color. Añadimos entonces un vaso de agua y dejamos cocer a fuego medio durante 8-9 minutos con tapa. Luego cocemos unos minutos más ya destapadas,  o hasta que se haya evaporado todo el líquido y veamos que estén tiernas.



El pesto de espinacas y nueces

Pelamos el ajo y lo cortamos por la mitad. Le retiramos el germen interior. Lo trituramos con la batidora.

Añadimos las espinacas - bien lavadas y secas - y trituramos un poco más.

Incorporamos las nueces y vuelta a la batidora. A mí me gusta que se note cierto crujiente del fruto seco, así que lo trituro pero no demasiado. Pero ahí ya, a vuestro juicio culinario...Rallamos un buen queso Parmesano en la pasta creada y exprimimos un poco de limón.

Por último vamos añadiendo Aceite de Oliva Virgen Extra - nuestro oro líquido - en la mezcla y vamos removiendo hasta obtener un pesto cremoso. La cantidad os la irá pidiendo el cuerpo, debe quedar únicamente a vuestro gusto.

NOTA: Es importante que vayáis probando según añadáis ingredientes para dar con el toque perfecto.





Resultado final del pesto de espinacas y nueces
La pasta y montaje final

Ponemos un cazo con abundante agua (SIN ACEITE, por favor) y lo llevamos a ebullición. Una vez que añadamos la pasta es el momento de incorporar la sal. Si lo hacemos antes retrasaremos el hervor. Dejamos cocer según nos recomiende el fabricante. Pero siempre recordar que terminaremos de cocinar la pasta en la sartén con la salsa, así que bajad un par de minutos de la recomendación.


Escurrimos ligeramente la pasta y la echamos en una sartén caliente. Añadimos un poco del agua de cocción (como 50 ml) y salteamos junto a las alcachofas. Añadimos el pesto de espinacas y nueces y removemos bien para que se impregnen bien los spaghetti. 



Servimos enseguida en platos hondos y rallamos si se quiere un poco más de queso Parmesano y decoramos con unas hojitas de albahaca o espinaca.

¡Que aproveche, hitchcookian@s! 

Spaghetti con alcachofas y pesto de espinacas y nueces

martes, 23 de junio de 2015

PESTO DE ENELDO

El pesto es una salsa típicamente italiana ideal para servir con platos de pastas, pescados, aves... El archi-conocido combina albahaca, piñones, ajo, Parmesano y aceite de Oliva. Vamos a darle una vuelta y mezclar otros ingredientes para ofrecer alternativas. El pesto de Eneldo es ideal para aderezar platos de pescado (aquí os dejo una propuesta de "Salmón con Pesto de Eneldo"), verduras y carnes. Un buen aceite de Oliva Virgen Extra terminará por culminar un peliculón culinario que os despertará la curiosidad y las ganas de prepararlo y combinarlo con la materia prima que más os plazca. ¡Mandiles arriba! 

INGREDIENTES

30 grs de eneldo fresco
50 grs de Aceite de Oliva Virgen Extra 
1 diente de ajo
Queso Parmesano rallado
30 grs de almendras crudas
Sal y pimienta

Tiempo: 5 minutos

Para empezar debemos decidir si queremos tirar de utensilios clásicos de la cocina como el mortero o "modernizarnos" y emplear herramientas batidoras o robots de cocina. Personalmente soy fan del mortero, y entre sus virtudes se encuentra...que libera estrés. Pack completo. Además, la palabra "pesto" viene del genovés "pestare", es decir, "machacar en mortero". Si queremos ser tradicionales... no nos queda otra. Nos ponemos.

Vamos a tostar las almendras. NOTA: también se puede preparar con avellanas o piñones (más clásico). Calentamos una sartén sin aceite y las vamos dorando ligeramente, vigilando que no se quemen. Buscamos un tostado ligero. Reservamos.


Picamos el eneldo finamente. Y lo echamos al mortero. Vamos incorporando el resto de ingredientes: el diente de ajo (sin el germen interior, que repite), el queso Parmesano recién rallado, las almendras, la sal y la pimienta. Trituramos con energía.

NOTA: Se puede sustituir el Parmesano por algún queso de oveja.

Añadimos un chorro bien generoso de Aceite de Oliva Virgen Extra y seguimos batiendo hasta conseguir una pasta homogénea.

El truco de cualquier salsa es vuestro paladar. Id probando hasta dar con el sabor y la textura ansiada. Si queréis que quede más espesa, echad menos aceite. Más ligero, más aceite.

Tapamos el pesto y lo guardamos en el frigorífico hasta que le toque salir a escena. ¡Que aproveche, hitchcookianos! 

viernes, 29 de mayo de 2015

POLLO AL PESTO (Cena#83)

La salsa pesto es una de las más populares salsas que nos han llegado de "la bota". Es fácil, es rápida, es sabrosa y es versátil (se puede sustituir la albahaca por rúcula, los piñones por almendras, el queso Parmesano por un queso viejo...) Normalmente ha sido la actriz co-protagonista de platos de pasta, pero también se puede usar para otros plato, como es el caso de hoy. El pollo y el pesto casan de maravilla y si lo culminas con un gratinado de horno, haces que un plato sencillo, cobre aspecto de obra maestra. Aquí va mi propuesta para alegrar la vida a una simple pechuga... ¡Mandiles arriba!

---------------------------
INGREDIENTES (2 personas)

1 pechuga de pollo
1 manojo de hojas de albahaca fresca
Aceite de Oliva Virgen Extra
50 gris de piñones
40 grs de queso Parmesano
Queso Emmental (rallado)
1 diente de ajo
Sal y pimienta

Tiempo: 20 minutos

Lo primero es dejar precalentando el horno para luego terminar la receta con gratinado.

Limpiamos y cortamos la pechuga de pollo en trozos grandes, como si hiciésemos solomillos de pollo. Los salpimentamos y reservamos.

Para el pesto

Normalmente hago el pesto en mortero y tiro de "brazo", pero siendo hoy una cena a cámara rápida, vamos a usar las herramientas que nos faciliten y sobre todo, nos acorten el tiempo de preparación.

Colocamos en  un vaso de batidora el diente de ajo (NOTA: conviene retirarle el gérmen del interior que es lo que "repite") y lo trituramos. Añadimos un buen puñado de hojas de albahaca (sin rama, sólo la hoja), una pizca de sal y los piñones y volvemos trituramos. Añadimos el aceite de oliva (la cantidad irá un poco a ojo, hasta que consigáis la textura que más os guste) y terminamos rallando queso Parmesano y mezclando todo.

NOTA: Si la salsa os queda demasiado espesa se puede aligerar con un poquito de agua. El truco, como en todo, se trata de hacerlo con calma e ir probando en cada paso para dar con "vuestro toque".

El pollo

Ponemos un poco de aceite en una plancha o sartén y cocinamos el pollo 1 minuto por cada lado a fuego vivo. Vamos pasando las tajadas a una bandeja de horno.

Cubrimos (o napamos) todos los trozos de pollo con la "Salsa Pesto" y espolvoreamos queso Emmental u otro queso que circule por vuestra nevera y queráis darle salida.

Metemos en el horno y gratinamos hasta que se dore el queso.

Sacamos y presentamos con un puñado de piñones (tostados en sartén) y unas hojas frescas de albahaca. ¡Que aproveche, hitchcookianos!

martes, 17 de febrero de 2015

PIZZA DE COLIFLOR A LA ITALIANA (Cena#72)

Hoy toca una cena...no tan a cámara rápida como estamos acostumbrados. Pero lo original de la propuesta merecía la excepción. Una pizza que no es una pizza. Un plato sorprendente, sano y muy completo para los estómagos más vegetarianos con ganas de "engañar" al paladar. Para los amantes de la coliflor (que sé que los hay) es una forma distinta de sacarle partido. Y, como en toda pizza, podéis "tunearla" como queráis: calabacín, salsa de tomate, aceitunas, pimientos... Aquí os dejo mi propuesta que extraje de AllRecipes.com. ¡Mandiles arriba!

INGREDIENTES (1 pizza)
1 coliflor mediana
Perlas de Mozzarella
Tomatitos cherry variados
Queso rallado
Jamón York
1 huevo
1 ajo picado
Perejil fresco picado
Sal y pimienta

Para la salsa pesto: 
Hojas de albahaca
Piñones
1 diente de ajo
Aceite de oliva Virgen Extra
Queso Parmesano
Sal

Tiempo: 45 minutos

Empezamos rallando la coliflor con ayuda de un rallador grande. Otra opción es triturar unos 2 segundos los ramilletes en la Thermomix. Más fácil, rápido y mucho menos tedioso.

Cocemos al vapor la coliflor. Echamos en una olla agua y colocamos la vaporera dentro (sin que llegue a tocar el agua) Dejamos que se cocine unos 15 minutos, hasta que esté bien tierna.

Sacamos la coliflor y la colocamos en un bol hasta que se atempere.

Aprovechamos para preparar la salsa pesto. Basta con tostar ligeramente unos piñones en una sartén sin aceite y los echamos en un mortero. Añadimos bastantes hojas de albahaca, un diente de ajo y sal. Vamos machacando hasta convertirlo en una pasta. Añadimos aceite de oliva y terminamos con parasen rallado. Probamos el punto de sal y listo.

Vamos pre-calentando el horno a unos 180-200º.

Una vez que se haya enfriado, la colocamos en un trapo de cocina y escurrimos bien todo el agua sobre el fregadero (veréis que sale mucha). Pues apretad, estrujad y removed el trapo hasta secarla por completo.

En un bol echamos la coliflor y añadimos un huevo, perejil fresco picado, el ajo picado, el queso rallado (el que más os guste), sal y pimienta negra. Removemos bien todos los ingredientes.

En una placa de horno colocamos papel vegetal y extendemos nuestra masa con las manos, dándole forma de pizza. El truco está en que quede lo más lisa posible, así que si os sale más cantidad, pues aprovechadla para otra ocasión, porque se puede congelar.

Cocinamos en el horno la masa durante 10 minutos, hasta que los bordes se doren.

Sacamos y añadimos una capa de salsa pesto y encima los tomates cherry, el jamón York, las perlas de mozzarella, queso parmesano y volvemos a hornear durante 10-15 minutos.

Listo para devorar. Una pizza...que no es una pizza. Que no nos acusen de poco originales nunca. ¡Que aproveche, hitchcookianos!